De vestido y en el closet
Tendría 6 o 7 años. Era un chico muy fantasioso. Imaginaba mundos secretos, otras dimensiones, tesoros escondidos, laberintos con seres maravillosos. Curiosamente, uno de los pasadizos que mi imaginación había creado se encontraba dentro del closet de la habitación de mis padres.
Era de tarde. Me había cansado de jugar a la nave espacial, esa que armaba poniendo 4 sillas, respaldo contra respaldo, con una sábana por encima. Aburrido, me puse a buscar en mi cabecita un lugar más recóndito y promisorio. Y se me ocurrió meterme en aquel placard.
Le tenía miedo a la oscuridad (toda una predicción, visto en retrospectiva). Sin embargo, fui sin pena y sin dudarlo a encerrarme en el viejo mueble de madera. Y soñando, imaginando que cruzaba el fondo del mismo en dirección a otras realidades, me enredé con los vestidos de mi mamá.
¡Qué lindo se sentía! Suaves, sensuales, frescos, ligeros. En diez segundos, sin repetir y sin soplar, me calcé uno de ellos. Era el traje perfecto. En el suelo, unos zapatos gastados, tipo sandalia, con tiras de cuero negro, le abrían paso a mis pies, que a pesar de sus dimensiones estaban, sin saberlo, dando un gran paso.
Mientras tanto, del lado de afuera, mi mamá me buscaba. Guiada por el ruido, entró a la habitación y me sacó del closet. Era muy temprano para ello, se ve, porque inmediatamente comencé a titubear, y no se me ocurrió mejor idea que decirle que estaba jugando a María Martha Serralima (mi mamá estaba gorda por entonces y sus vestidos eran gigantescos).
No recuerdo mucho más, pero adivino un par de gritos, un probable sopapo, y una gentil invitación a poner el ropero en orden.
Todo podría haber terminado ahí. No obstante, se trató de un gran comienzo. Fuera del closet (al menos en el terreno de lo lúdico), di rienda suelta a mi imaginación y encarné frente a mis amiguitos toda clase de heroínas. A María Martha Serralima la sucedieron la Mujer Maravilla, Cheetarah, She-Ra, la Mujer Araña, la Mujer Biónica, la nena de los Gemelos Fantásticos, y un sinnúmero de mujeres cuyas historias, secretos y poderes tomé prestados.
Era excitante. Me sentía poderoso. Mi imaginación no tenía límites, y el vértigo de correr por la vereda gritando “¡Yo soy She-Ra!” era lo más parecido al éxtasis.
El tiempo pasó, algo de mí continuaba en el closet, junto a mi mamá y el resto de mi familia, hasta que un día, dejé caer el velo y mis propias historias verdaderas fueron las protagonistas de la revelación. Nadie lo había sospechado. Nadie me había visto jugar en serio. Nadie había notado cuánta verdad escondía tras la fantasía de mis personajes.
Pero tan fervientemente creí en mí y en mi historia, en mis personajes y en mis realidades, que la verdad surgió sola e irreprochable. Tuvo que pasar un tiempo, varios episodios de esta aventura que es el transcurrir de la vida, pero al final, todos aceptaron este alterego que habían visto crecer sin darse cuenta.
Amo mis realidades, amo a mi familia, celebro haber tenido fe en mí y en ellos, y les agradezco por permitirme mostrarles que tras el closet, hay otras realidades.
Publicado en: idas y vueltas el jueves, 12 de junio de 2008 a la/s 04:25
Que lindo!
Me hizo acordar a mi post sobre la Mujer Maravilla.
Para mí las heroínas nos guarecieron, nos hicieron sentir menos solos.
Hasta el día de hoy las sigo queriendo a las heroínas, me llaman la atención... y hasta guardo algunas fotos por ahí, jaja!
Ah! los gemelos fantásticos se llamaban Jayna, Zan y Gleek era el monito! jajaja
Un beso!
Chris
buenas buenas!
como le anda niño??
bue, te digo la verdad... no sabía en cuál de todos los blogs firmarte!!! jajajaa
y esto no es chamuyo, me leí todos los posteos de los 4 blogs, empecé con uno y medio que no pude parar, x suerte no había tantos posteos, sino la de leerlos todos te la iba a deber! :P
la verdad que es muy bueno lo que escribís, de otra manera la de leerlos todos... u know! ;)
bueno, solo pasaba a hacer la primera visita, aunque seguro que yo tb voy a volver seguido x estos pagos!!! [así que no seas chanta y actualizá]
gracias x pasar x mi[s] blog[s], es bueno encontrar gente que mueva [además del cuerpo] las neuronas!!!
que tengas un muy buen viernes!!!
beso grande
Max
hermosa historia
:)
besos!
Hola! Pasaste hace unos dias por mi blog y vine a visitarte. Me gustó el blog. Como Max no sabias donde firmar. Pero tambien desembarque en este, jaja.
Bueno, pasare seguido.
Saludos
chris:
Qué bueno recordar tu post, muy bueno.
Todavía recuerdo la sensación de libertad cuando corría por la vereda sintiéndome una de nuestras heroínas. Muy cierto lo que decís, eran toda una compañía.
Jayna! me había olvidado el nombre!
Gracias por el aporte.
Besotes
max:
Bienvenido! Gracias por pasar, por leerme, por tus palabras.
Nos seguimos leyendo, un beso.
marga:
Qué bueno verte por acá, otro beso para vos.
germánico:
Bienvenido también, gracias por la visita.
Nos seguimos leyendo.
Un abrazo
como me gustaba She-ra!!!... tambien He-man, obvio... pero por diferentes motivos.
Un beso, como ves estoy leyendo tu blog... me quedan los otros tambien!
peter:
gracias por la visita. Qué bueno compartir algo tan valioso como los juegos de la infancia.
Nos estamos leyendo.
Besotes
Dani